Habitan en una extensa zona del estado de Chiapas; la mayor parte de ellos habita en la región conocida como los Altos, y un número menor se asienta en el norte de la entidad. Los municipios tzeltales con mayor superficie son los de Ocosingo, Chilón y Altamirano, y los que presentan una mayor densidad de población son Tenejapa y Oxchuc.
La región de los Altos de Chiapas se encuentra en la cadena montañosa central, que se eleva hacia el sudeste desde el valle del río Grijalva. Esta zona constituye un macizo montañoso con numerosas cumbres, barrancas y cañadas, y tiene una altura promedio cercana a los 2 000 msnm. La mayoría de los terrenos están formados por laderas, por lo que son poco propicios para la agricultura y la ganadería; además, sufren un severo proceso de erosión. Los ríos de la región son pocos y de escaso caudal; entre ellos sobresale el Amarillo y el Yaxamal.
El clima de los Altos de Chiapas se distingue en dos épocas: la de secas, que inicia en noviembre y concluye en mayo, y la de lluvias, que comienza en los últimos días de mayo o en los primeros de junio y termina en octubre. La temperatura media anual es de 20º C en las tierras templadas, comprendidas entre los 800 y 1 550 msnm. Las tierras frías, ubicadas a poco más de 1 500 msnm, tienen una temperatura media anual que oscila entre 12 y 15º C. La mayor parte del territorio goza de un clima templado húmedo.
La vegetación está formada por diversas especies de confieras que, en los municipios de Huixtán y Chanal, representan bosques con posibilidades de explotación maderera. La fauna ha sufrido graves daños, aunque aún se pueden encontrar conejos, tuzas, ardillas, mapaches, zorrillos, culebras, tlacuaches, venados y pájaros de hermosos colores.