No hay información muy clara sobre el origen del pueblo mazahua, algunos autores lo relacionan con las tribus chichimecas de cazadores que fundaron las ciudades de Culhuacán, Otompan y Tula; otros afirman que sus integrantes provienen de los acolhuas, que dieron origen a la provincia de Mazahuacán, actualmente Atlacomulco, Ixtlahuaca y Jocotitlán.
Antes de la llegada de los aztecas al centro de México, Xolotl, el gran monarca de los chichimecas conquistó el territorio mazahua, repartiendo las tierras de Mazahuacán entre sus jefes principales, eligiendo Jocotitlán para él, como centro de su reino.
Posteriormente, ya bajo el dominio de los aztecas, la provincia de Mazahuacán queda sujeta al reino de Tlacopan.
Durante la conquista española, es Gonzalo de Sandoval quien somete a los mazahuas al nuevo régimen. Atlacomulco, Almoloya de Juárez y Jocotitlán quedan sujetos a encomienda, y los franciscanos inician el proceso de evangelización. Más tarde se conforman grandes haciendas entre las que se encuentran la de Tultenango en El Oro, la de Solís en Temascalcingo y la Villagré en Jocotitlan.
Los mazahuas tuvieron participación en los movimientos armados de la Independencia y en la Revolución de 1910.