La mayor parte de los tarahumaras viven en la Sierra Tarahumara, ubicada en el noroeste de México, en el estado de Chihuahua, aunque viven grupos minoritarios en los estados de Durango, Sonora y Sinaloa.
La región se caracteriza por contar con montañas que alcanzan alturas hasta de 3,250 metros sobre el nivel del mar, así como terrenos bajo en las barrancas, como la del río Urique, con 500 metros sobre el nivel del mar. Por ello mismo la vegetación comprende bosques de coníferas, pino piñonero, álamo, encino, madroño, cedro, guamúchil, mezquite y diversos arbustos y pastizales según la altura, y un clima variado desde las frías cumbres hasta temperaturas cálidas en las zonas bajas.
La fauna comprende oso negro, puma, lobo mexicano, coyote, gato montés, mapache, zorrillo, venado cola blanca y ardilla, entre otras especies, que en algunos casos enfrentan riesgos de extinción; entre las aves, se encuentran guajolote silvestre, correcaminos, cuervo, águila, zopilote y tecolote, entre otros; mientras que entre las especies acuáticas existe bagre, trucha y carpa.